martes, 8 de junio de 2010

Silvio en el Carnegie y los Unicornios que no paran de Volar.



Fue hace casi 30 años en la esquina de una noche de noviembre que un compañero me paso un casete sin nombre y resquebrajado, cubierto de cinta aislante, para aislarlo de la guardia, de la policía y evitar que estos te desaparecieran por subversivo o por escuchar música subversiva, que en su racional estupidez, significaba lo mismo.

En ese casete se encontraban: Ojala, Te Doy una Canción, Por quien Merece Amor, Rabo de Nube, etc. Canciones que rompían el molde de lo comercial, de lo panfletario, de lo fácil, canciones que se convirtieron en los alfileres que me dejarían prendido al lienzo de tu arte.

Después de cientos de canciones en Casetes, LP’s, CD’s, MP3’s, hasta hoy pude concretizar uno de mis mas escabullidos deseos, el cual era escucharte en vivo.

Quiero darte las gracias Silvio por el concierto de esta noche. Espere casi 6 lustros para poder verte así en vivo, viviendo o reviviendo mi vida. Cada canción fue una estación donde este tren aun no vencido, se detuvo a beber amor y rabia, pero más amor, mucho más.

Comenzaste el concierto dándole vuelo a “La Gaviota” pero no solamente la gaviota fue la que voló, si no que miles de unicornios que todos los presentes llevábamos atados a nuestra memoria y ahí los dejamos volar.

Era imposible que en las 2 horas y media que duro el concierto tocaras todo,pero hiciste un buen trabajo con la muestra, porque abarco todas las épocas de tu música, una música sin edad.

Casi al final, cuando las puertas se cerraron por primera vez y la gente no paraba de gritar, ni de beberse las lagrimas. Saliste y la guitarra amanso a la multitud, de repente vi volar a mi unicornio, al compañero Neto, al que se me perdió hace veintitantos años, que me decía grita por el poeta, grita por el poeta y los dos gritamos “QUE VIVA ROQUE” y otras voces se unieron a nuestro grito y tu nos regalaste la canción de tu Unicornio, la canción de nuestro poeta Roque Dalton y la de los otros miles Unicornios que te acompañaron en esta maravillosa velada.

De nuevo gracias Silvio y a ese fabuloso grupo que te acompaña, en especial a tu compañera Niurka que con su flauta me hizo sentir como el ratoncito del cuento!!!!